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Se clausura el curso 2018/19 del Centro de Día para Personas con Enfermedad Mental “Princesa Letizia” que cuenta con una veintena de usuarios
Autoridades locales han clausurado el curso 2018/19 del Centro de Día para Personas con Enfermedad Mental “Princesa Letizia” que cuenta con una veintena de usuarios y usuarias, que reciben una atención integral y rehabilitadora a nivel psicosocial.
El alcalde, Juan José Cánovas, y el concejal del Bienestar Social, que gestiona los centros de día de Totana, Javier Baños, acompañados por los ediles Víctor Balsas y Maribel Rubio, asistieron al acto con el que se da por cerrado el curso hasta el próximo mes de septiembre.
Los usuarios recibieron un diploma acreditativo de manos de los responsables municipales como reconocimiento a su labor y esfuerzo durante todo el año; y explicaron, de viva voz, sus experiencias durante este curso y propósitos para el venidero.
Además, se proyectó un original vídeo realizado por los mismos alumnos en el que presentaron el programa de actividades en los diferentes talleres, viajes y salidas programadas organizadas durante el curso que finaliza.
Por último, pusieron en escena una entrañable obra de teatro en la que todos los usuarios desempeñaron un magnífico papel interpretativo.
Durante todo el curso, los participantes desarrollan programas con los objetivos de prevenir su deterioro psicológico y cognitivo, potenciar la autonomía personal y social, favorecer y apoyar la integración en la comunidad y promover un estilo de vida saludable entre las personas con diagnóstico en salud mental.
El Centro de Día incluye numerosas prestaciones como son los servicios básicos de asistencia en las actividades básicas de la vida diaria (ABVD), transporte accesible y manutención; servicios terapéuticos de prevención, asesoramiento y orientación; de atención social, habilitación o atención ocupacional; asistencial y desarrollo personal; atención psicológica; y terapia ocupacional.
Además, se llevan a cabo programas de mejora de las capacidades cognitivas, psicoeducativas, psicoafectivas y socializadoras; entrenamiento en tareas ocupacionales y de recuperación laboral, si procede; entrenamiento en habilidades de autocuidado; intervención con familias (información, asesoramiento y autoayuda); integración comunitaria, soporte social y seguimiento; seguimiento y evaluación de los programas de intervención personal.
De igual forma, se elabora y planifica un programa individualizado de atención que garantice la atención y los apoyos apropiados a las necesidades de cada una de las personas atendidas, así como su seguimiento y evaluación del mismo.
