El alcalde, Juan José Cánovas, y la concejala de Cultura, Eulalia Moreno, han inaugurado este jueves la exposición “Presas de Franco”, que repasa la experiencia penitenciaria de las mujeres entre 1939 y 1959, y que permanecerá al público en la primera planta del Centro Sociocultural “La Cárcel” hasta el próximo 27 de mayo.
En el acto de inauguración han estado presentes también la concejal Antonia Camacho y los promotores que han traído la muestra itinerante a la Región de Murcia, que en las últimas semanas ha estado en el municipio de Alhama de Murcia.
Mediante imágenes, documentos y testigos recuerda este periodo, haciendo un tratamiento especial a los centros penitenciarios más significativos de la época, como el de Ventas en Madrid, Saturrarán en el País Vasco, Palma y Les Corts en Barcelona, entre otros.
Se trata de mujeres vinculadas a la política y a acciones públicas concretas como las reformas que se registraron durante la II República, entre las que se encuentra activistas que estuvieron en prisiones en campos franceses y en cárceles de Madrid, Zaragoza y Segovia.
La exposición está promovida por la Fundación de Investigaciones Marxistas, y trata de una serie de fotografías, cartas y textos manuscritos que desvelan la lucha, el dolor, la condena y la resistencia de miles de presas castigadas por la dictadura en su doble condición de ser de izquierdas y de mujeres que no aceptaron el papel de sometimiento y dependencia que el nacional-catolicismo les tenía reservado.
“Presas de Franco” se propone contribuir a visualizar la experiencia penitenciaria femenina de las primeras décadas de la dictadura franquista, a partir de un diálogo continuo entre memoria e historia, donde se conjuguen las imágenes y los documentos con el recuerdo y los testimonios de las mujeres encarceladas.
La muestra ofrece documentación y fotografías de variado origen, tanto de archivos personales como públicos, conviven con los recuerdos -grabados y transcritos- de las verdaderas protagonistas de la exposición. No sólo recoge fotografías, muchas de ellas inéditas, sino también documentos recogidos en las cárceles femeninas de toda España durante esos años.
Al mismo tiempo, el recorrido por los diferentes ejes temáticos -los niños en prisión, el trabajo, la resistencia organizada- incluye el tratamiento individualizado de las cárceles más significativas, verdaderos universos particulares alojados dentro del más amplio de la represión femenina franquista.
Esta exposición sirve muy bien para conocer mejor una parte de la historia a la que habitualmente aún se le presta poca atención en los centros educativos y que forma parte de nuestra esencia como personas y del pasado que nos ha convertido en lo que hoy somos.
Además, a través de reproductores de MP3 se pueden escuchar las voces de aquellas mujeres y, de esta forma, con la suma de imagen, sonido y texto, el espectador pueda introducirse en ese microcosmos y entender lo que sufrieron cientos de represaliadas políticas.
La exposición se divide en siete partes: Las galeras de mujeres, El castigo, Los nińos en la prisión, Las prostitutas, El trabajo, La resistencia y La memoria.
Los responsables municipales invitaron a sus visitantes a “visualizar la experiencia penitenciaria femenina de las primeras décadas de la dictadura franquista, a partir de un diálogo continuo entre memoria e historia, donde se conjugan las imágenes y los documentos con el recuerdo y los testimonios de las mujeres encarceladas para conocer mejor, sin revanchismos, esta parte de la historia de España”.
