Si bien es verdad que todos conocemos el nombre de este establecimiento, solemos decir que vamos a Roque el de las flores, porque así es archiconocido Sebastián Cánovas Martínez en su floristería del Raso. Hombre de refinado gusto, suele hacer exquisitos ramos, ornamentación de tronos de Semana Santa, arreglos florales de bodas y otros eventos, así como decoraciones de locales y celebraciones como nos hizo cuando presentamos 50 libros editados en Totana por Caja de Semillas.
El hecho de que lo conozcamos más por Roque que por su verdadero nombre tiene una curiosa y simpática explicación: Su madre estaba embarazada y faltaban un par de semanas para el alumbramiento cuando su padre decidió marcharse unos días con unos amigos a un cortijo en las cercanías de los pozos de la nieve, como hacían cada año. La esposa le dijo que no se fuera por si el parto se adelantara pero él no lo consideró así. Pero se puso de parto e intentó aguantar hasta la llegada del esposo. Vano intento. A pesar de sus esfuerzos, el día de San Roque alumbró a Sebastián con un peso de seis kilos y medio.
Cuando el padre regresó encontró a su esposa sin la enorme tripa, lo que le hizo pensar que tendría en casa un bebé, pero en lugar de hallarlo, encontró un niño grande vestido con un traje gris y una corbata color magenta.
El nacimiento de Sebastián el día de San Roque unido a su inoportuno alumbramiento y el peso del bebé hizo que le llamaran Roque en lugar de su nombre real.
Sebastián hizo sus estudios primarios y desde muy joven salía a trabajar, aunque la formación media la hizo en la escuela de adultos. Al cumplir los 18 años se marchó a buscarse una mejor vida a Francia donde desempeñó diferentes oficios hasta recalar en una floristería, se aficionó a ese arte, lo aprendió bien, decidió regresar a Totana y poner una floristería, como hizo en el local en que se encuentra desde el año 1983.
Posee un innato sentido de la estética que le hizo aprender muy bien el arte floral, haciendo además diferentes cursos de formación en diferentes lugares de España, tanto en confección de distintos arreglos florales como de decoración y escaparatismo, Master Class, con gran cantidad de títulos que tiene, amén de que suele hacer muchos cursos de reciclaje y actualización de su arte.
Hemos visto muchos escaparates, locales decorados para Navidad, bodas, salones, exposiciones y ferias en las que su arte se ha hecho patente, pues sabe combinar con elegancia elementos cotidianos con su arte floral.
Si bien es verdad que ha arreglado diferentes tronos de Semana Santa, es tal vez su más constante obra la ornamentación de la Verónica que realiza anualmente, así como en muchas ocasiones La Samaritana, llevando en todos sus arreglos el sello distintivo de su exquisito arte, que también ha compartido generosamente con otras personas.
Otra característica de Sebastián Cánovas es su afición por los disfraces de Carnaval, pues cada año inventa uno diferente, no para vestirse, sino para desnudarse, pues se hace los trajes con menos tela que necesita un pañuelo de la nariz. Sus modelos los diseña y confecciona él, así como los maquillajes, llamando siempre la atención por su originalidad.
Juan Ruiz García
