El Ayuntamiento de Totana, con su alcalde Juan José Cánovas a la cabeza, ha realizado una recepción institucional al histórico dirigente y ecologista andaluz, Francisco Casero Rodríguez, aprovechando su visita a este municipio.
Francisco Casero Rodríguez, que en la actualidad es presidente de la Fundación SAVIA, ha visitado Totana con motivo de una Jornada sobre la Agricultura Ecológica en España y en la Región de Murcia, que ha organizado hoy la Cooperativa Agraria de Totana (COATO).
En la recepción también ha estado presentes el primer teniente de alcalde, Andrés García Cánovas, el presidente de COATO, José Luis Hernández Costa, y numerosos miembros de la Corporación municipal.
Casero, que también es consejero de honor de COATO, ha hecho gala durante años de su lucha y compromiso pacifista con los jornaleros andaluces.
Durante la recepción los intervinientes han glosado la figura del histórico dirigente sindical y han repasado su trayectoria histórica y profesional. Al término de la recepción, se han intercambiado
Este líder ecologista, que nació en Marchena (Sevilla) en 1948, es un personaje histórico y crucial de la historia de Andalucía, de forma que la vida de los jornaleros no sería la que es sin sus luchas y reivindicaciones.
De igual modo, Casero, que fue uno de las cabezas visibles del Sindicato Obrero del Campo en Andalucía, se ha caracterizado, en su trayectoria sindical, por promover decenas de huelgas de hambre y ocupaciones de tierras de terratenientes para reclamar empleo en el mundo rural, así como dignidad, honestidad y un futuro verde.
Además, ha intentado con sus ayunos y reivindicaciones llamar la atención ante la falta de sentido común, las desigualdades y la excesiva burocracia que afecta y perjudica los proyectos y la vida de los ciudadanos.
La Fundación que preside Casero, SAVIA, tiene vocación de servicio hacia un compromiso en la defensa de valores en el entorno rural, promoviendo y cooperando en el desarrollo social, económico, patrimonial, paisajístico y cultural; y mejorando la calidad de las personas que viven en él, así como propiciando el progreso y la defensa del sector ecológico.
Asimismo, se persigue, igualmente, el mantenimiento de una agricultura y ganadería sostenible con la conservación del medio ambiente, coadyuvando a mantener el territorio, la biodiversidad, la autosuficiencia y la permanencia, para evitar así el despoblamiento de las zonas rurales; contribuyendo asimismo a un crecimiento inteligente que supere el desequilibrio demográfico y las deficiencias de infraestructuras y servicios, al reforzar la identidad cultural, la interconexión del conocimiento y la sabiduría, y la autoestima de la sociedad rural.
Entre los fines de su entidad están los de promover, impulsar y cooperar en el desarrollo social, económico, patrimonial, paisajístico y cultural del entorno rural; fomentar valores de identidad, conocimiento, sabiduría y autoestima del entorno rural; incentivar la defensa del medio ambiente y la producción ecológica e impulsar la investigación, proyectos I+D y la formación profesional.
La actitud de Casero recibe más conocimientos fuera que dentro de Andalucía. El Instituto Víctor Seix de Polemología de Barcelona le otorgó el premio internacional Memorial Juan XXIII, en 1992 recogió en Bilbao el premio Ana Frank a la Cultura de la Paz y en 1990 su acción por proponer medidas contra la erosión, la desertificación, la pérdida de masa forestal y la explotación abusiva de los recursos forestales en el Pacto por la Naturaleza le hace valedor del Premio Europeo a la Conservación de la Naturaleza, entre otros galardones.