El Ayuntamiento de Totana ha rehabilitado ocho de los catorce conjuntos escultóricos que conforman el Vía Crucis del paraje del Corazón de Jesús, ubicado en las proximidades del santuario de la patrona Santa Eulalia.
El alcalde, Juan Morales; el concejal de Fomento, José Martínez Andreo; y el artista escultor, Anastasio Martínez Valcárcel; visitaron el pasado martes, 5 de abril, el paraje con el fin de comprobar el resultado final de las actuaciones de recuperación de las esculturas.
La actuación se ha acometido dentro de las ayudas de la Iniciativa Comunitaria de Desarrollo Rural Leader Plus, que gestiona la Sociedad para el Desarrollo Rural "Integral".
Las obras de esta primera fase, que han tenido un período de ejecución de seis meses, han contado con un presupuesto total de 30.000 euros, de forma que en la segunda se rehabilitarán las seis esculturas restantes del Vía Crucis y la imagen principal del Corazón de Jesús, ésta última que tiene una altura de unos 8 metros y está sobre un pedestal de otros 8 metros.
Las obras de restauración se han acometido en las estatuas de Santiago y El Ángel, que han tenido un cambio de ubicación en la zona por la ejecución de la nueva rotonda de acceso a la ermita; y las estaciones primera, segunda, tercera, cuarta, quinta y duodécima.
El responsable de la restauración ha sido, precisamente, el autor que realizó dicho conjunto escultórico.
El concejal de Fomento, José Martínez Andreo, destacó la importancia de esta acción de recuperación y conservación de parte del patrimonio histórico-artístico y cultural del municipio así como de promoción del mismo.
Por su parte, el alcalde recordó que esta obra es continuación de la actuación de restauración que se acometió en la zona del Mirador del Corazón de Jesús en 1998, donde se procedió al acondicionamiento e iluminación del entorno gracias a otra subvención del proyecto europeo Leader.
El conjunto del Vía Crucis fue encargado por el párroco Juan José Noguera en 1965 y se llevó a cabo entre los años 1966 y 1968 con el fin de dotar de un recorrido penitencial colocando las estancias en consonancia con la naturaleza e integradas en el paisaje del entorno. El Vía Crucis cuenta con cuenta con catorce grupos escultóricos en el que se integran 33 figuras de 1,70 metros de altura, realizadas en piedra artificial y de estilo expresionista.
