El alcalde de Totana, Juan Morales, y el concejal de Hacienda, Roque Molina, dieron a conocer el pasado martes, 10 de febrero, los resultados del informe económico financiero encargado por el actual equipo de Gobierno a una consultoría externa a principios de esta legislatura, para conocer el estado de las arcas municipales.
El edil de Hacienda explicó precisamente que la realización de este estudio económico financiero tenía como objetivos conocer la situación real y comprobable del Ayuntamiento y las sociedades municipales, y facilitar al nuevo equipo de Gobierno los datos y antecedentes precisos para tomar las decisiones oportunas en materia económico-financiera.
El concejal de Hacienda precisó que el estudio se ha realizado en dos momentos concretos: a 31 de diciembre de 2002 que es la fecha de cierre del ejercicio presupuestario de 2002, y a fecha del 14 de junio de 2003, en que tomó posesión el equipo de gobierno del PP.
Molina señaló que el equipo de Gobierno cuenta con las conclusiones de dicha auditoría desde el pasado mes de diciembre, aunque en este tiempo se han estado analizando los resultados para empezar a adoptar las medidas que consideren oportunas, y citó en este sentido que una de las primeras fue la disolución de tres de las cuatro sociedades municipales que había.
Los responsables municipales explicaron que a fecha de 14 de junio de 2003, en que tomó posesión el nuevo equipo de Gobierno, la deuda total del Ayuntamiento ascendía a unos 20,5 millones de euros, según se desprende del estudio económico financiero. De ella, informaron que la deuda a corto plazo ascendía a 12,8 millones de euros, según arrojan los datos de dicha auditoría. «Si se tiene en cuenta que a fecha 14 de junio de 2003 tanto el Ayuntamiento como las sociedades municipales disponían de unos fondos líquidos de 1,1 millón de euros, y que lo que se le debía al Ayuntamiento era de 5,6 millones de euros, en el caso más favorable de que se hubiese cobrado todo lo que estaba pendiente de cobrar a lo largo de ese año, se hubieran obtenido unos 6,7 millones de euros, que apenas sí alcanzaría para poder pagar la mitad de la deuda que existía en el Ayuntamiento en ese determinado momento», apuntó el edil de Hacienda.
Molina también detalló que la deuda a largo plazo por operaciones de crédito concertadas con entidades financieras ascendía aproximadamente en esa fecha a unos 7,7 millones de euros. En este sentido, indicó que "teniendo en cuenta que en junio de 1999 dicha magnitud era de 856.000 euros, según la cuenta general de dicho año, puede observarse que durante la pasada legislatura, la deuda a largo plazo con entidades financieras se ha multiplicado por nueve desde el año 1999".
El edil de Hacienda manifestó que la situación que encontró el actual equipo de Gobierno al hacerse cargo del Ayuntamiento ha sido la de "colapso financiero" e indicó, ante las críticas de la oposición de falta de credibilidad de este estudio, que "el informe podrá tener más o menos credibilidad, pero lo que está claro es que las facturas sin pagar son facturas sin pagar" y argumentó que los datos de este estudio se van a poner a disposición de todos los vecinos en el servicio de atención al ciudadano del Consistorio, además de colocarse para su consulta en la página web municipal.
El responsable municipal de Hacienda también destacó que el anterior equipo de Gobierno aprobó para el ejercicio de 2003 un presupuesto que rondaba los 33 millones de euros, incluyendo tanto el del propio Ayuntamiento como el de las diferentes sociedades municipales, y resaltó en este sentido que mientras que en el presupuesto exclusivo del Consistorio (sin contar el de estas sociedades) se contemplaba recaudar unos 22,5 millones de euros, "la realidad ha demostrado que en el año 2003 apenas sí se han recaudado 15 millones de euros, pero más curioso todavía, hemos sido capaces de gastar 21 millones de euros". Asimismo indicó que de esa cantidad, a fecha 14 de junio de 2003 "ya se habían comprometido o gastado aproximadamente 16,4 millones de euros".
Por su parte, el alcalde, Juan Morales, señaló que se va a convocar un pleno extraordinario para abordar la situación de las arcas municipales «para que estos magníficos artífices de la financiación y de la economía de nuestro municipio durante los últimos cuatro años -en referencia al anterior equipo de Gobierno de PSOE e IU-, que nos digan a ver la solución real de este problema».
Además, el primer edil habló de la puesta en marcha de un plan de viabilidad financiera para atender a corto y medio plazo a los proveedores pendientes de cobro y también dijo que se aplicarán políticas de control de gasto: "El plan de viabilidad parte del déficit cero, no gastar más de lo que se ingresa; entonces, queremos hacer un presupuesto real, que se ajuste a la realidad de nuestro municipio. A eso hay que añadirle que vamos a tocar en todas las puertas, tanto de la Comunidad Autónoma como del Estado para que vengan de fuera todas las inversiones que puedan venir; y al mismo tiempo vamos a incentivar el sector que puede generar riqueza en nuestro municipio, que es el sector primario, de la agricultura y ganadería, y fundamentalmente el sector industrial".
Morales habló de una situación de "quiebra real" del Ayuntamiento. Además, señaló que la nueva política económica del Ayuntamiento "será acorde a las necesidades y no a la realidad virtual de la anterior legislatura".
Dudas del PSOE
Por su parte, el Partido Socialista de Totana ha señalado, en un comunicado enviado a los medios de comunicación, que duda de la objetividad de la auditoría e indica que no pueden entrar a valorar el contenido de la auditoría puesto que lo desconocen ya que sólo tenían conocimiento a través de los medios de comunicación.
«El hecho en sí de que el contenido de la auditoría se haya presentado ante los medios de comunicación demuestra que el principal objetivo del gobierno municipal es el mediatico», añaden los socialistas en esta nota.
«No es casualidad que ahora se haya dado a conocer el contenido de la auditoría. Se ha hecho coincidir con la pre-campaña electoral y en un momento en el que se ha trasladado a la opinión pública la parálisis que está viviendo la gestión municipal, ya que el gobierno municipal dispone de estos datos desde el mes de septiembre», indican las mismas fuentes.
Para los socialistas, «curiosamente la auditoría, en lo que conocemos, dice lo mismo que decía el Partido Popular en la campaña electoral de mayo. Y es que, esto tampoco es casualidad, ya que la auditoría se encargó sin licitación pública al asesor personal de Juan Morales, alcalde de Totana, en el precio de seis millones de pesetas cuando su valor de mercado ronda el millón de pesetas».
El PSOE apunta que «lo conocido de la auditoría elude algunos datos importantes como por ejemplo el incremento patrimonial del Ayuntamiento en el periodo 1999-2003 que superó los 30 millones de euros, la repercusión de las inversiones en infraestructuras públicas realizadas por el Ayuntamiento de Totana que en este periodo ha tenido en la actividad económica del municipio o el aumento de la capacidad de recaudación como consecuencia del incremento de la actividad económica». Asimismo, los socialistas llaman la atención sobre que «la propia Comunidad Autónoma en su último informe sobre el estado económico de los ayuntamientos de principios del año 2003, indica que la deuda del Ayuntamiento de Totana por habitante está por debajo de la media regional, que igualmente la presión fiscal por habitante en Totana está por debajo de la media regional».
Los socialistas matizan en la nota que «el Grupo Municipal Socialista viene diciendo desde hace muchos años que la situación económica del Ayuntamiento de Totana, al igual que la del resto de ayuntamientos de la Región y España no es la deseable como consecuencia de la deficiente financiación de la Administración Central y especialmente de la Administración Regional. Los ayuntamientos estamos obligados a prestar multitud de servicios que son competencia de otras administraciones ya que no tienen la financiación correspondiente».
Los socialistas dicen en el comunicado que «el alcalde de Totana mintió ante los medios de comunicación al dar datos erróneos sobre la venta del patrimonio de suelo del Ayuntamiento. Aseguró que el anterior equipo de gobierno dilapidó el patrimonio en suelo, cuando la realidad es que el anterior gobierno compró muchísimo más suelo del que vendió». Para el PSOE «lo que pretende el gobierno local es crear alarmismo sobre la situación económica del Ayuntamiento de Totana para desprestigiar al anterior gobierno y justificar su ineficacia e incumplimientos electorales».
