Un año más, los totaneros acudieron a recordar a sus difuntos con motivo de la festividad de Todos los Santos. Por ello, tanto el día 1 de noviembre, como los anteriores, fueron muchos vecinos los que se acercaron hasta el camposanto local para rendir un homenaje a sus seres queridos fallecidos.
Flores de multitud de clases y colores, como marca la tradición, se pudieron ver en el camposanto local, portadas por vecinos que querían mostrar así a sus familiares o amigos fallecidos que aunque ya no están en esta vida, se les sigue llevando muy dentro del corazón.
En otro orden de cosas, en los últimos días, informaron fuentes del cementerio, se ha acondicionado mejor el sistema de agua del cementerio y se ha dotado de más acometidas para dar mayor presión a los puntos de agua existentes, con el objeto de mejorar el servicio que se presta a los usuarios. Próximamente se tiene previsto continuar con el adoquinado de las calles del cementerio en las que falta, ampliar el sistema de megafonía, instalar ceniceros y colocar banquillos especiales para la colocación de las coronas florales. Además, se pretende que comiencen a realizarse misas en la ermita, que fue rehabilitada el año pasado, y dotarla de mobiliario que permita albergar los útiles y enseres religiosos.
El cementerio «Nuestra Señora del Carmen» fue,en días pasados en definitiva, un ir y venir de vecinos residentes en el municipio y también de otros totaneros que se acercaron desde fuera a visitar a sus familiares.