Un anciano sale ileso tras derrumbarse parte de su vivienda

Parte de una vivienda de la calle San Ramón de Totana se vino abajo el pasado lunes, 23 de septiembre. El suceso se produjo por la tarde cuando en el interior de la vivienda se encontraba su propietario, un anciano que resultó ileso, según informaron fuentes de la Policía Local.

El incidente se produjo alrededor de las 16,45 horas cuando dentro de la vivienda se encontraba su dueño, Agustín Espinosa Martínez, un hombre de 73 años, que no sufrió daños. El hombre se encontraba durmiendo la siesta en su habitación y debido a que padece sordera, no se enteró en un primer momento del derrumbamiento de la pared medianera y parte de la techumbre de la casa. Ayudado por unos vecinos salió de la vivienda.

En el solar contiguo la máquina excavadora de una empresa constructora se encontraba realizando trabajos de cimentación para edificar unas viviendas de nueva construcción, lo que al parecer supuestamente pudo provocar la caída de la pared medianera.

El hijo del propietario de la casa, José Francisco Espinosa López, no se encontraba en la vivienda cuando ocurrió el suceso y se enteró de él cuando regresaba a su casa, en la que vive con su padre, casi una hora después de los hechos. En concreto, explicó que se derrumbó una pared medianera, lo que dejó a la intemperie la despensa, sala de estar, trastero y una cámara, entre la planta baja y el primer piso de la casa.

José Francisco Espinosa explicó que al parecer "la pala que estaba haciendo los cimientos de la casa nueva, ha tocado en la pared medianera y ésta se ha venido abajo dejando la casa falseada y cayendo el lugar de la casa donde más solemos habitar".

De hecho, este joven comentaba que su padre suele dormir la siesta en un sofá de la sala de estar, sobre el que cayó un tabique entero, aunque ese día optó por hacerlo en su habitación, por lo que en el momento del suceso, por suerte, no se encontraba allí.

Este joven apunta que regresaba a su casa, a la hora habitual, sobre las seis de la tarde, y "me he

dado cuenta que me faltaba una pared". El joven señala que "primero he pensado en mi padre o en si mi hermano se encontraba dentro. Luego, al comprobar que no estaban heridos, ufff, -comenta pensativo- y ver lo que había pasado en la casa, me ha dado rabia también".

José Francisco señalaba esa misma tarde, mirando en lo que había quedado convertido su domicilio, que de momento se habían quedado sin la vivienda en la que residen desde toda la vida ya que va a ser necesario derruirla.

Además, añadió no disponer de otro sitio para dormir aunque reconoció que el propio alcalde, Alfonso Martínez Baños, le había ofrecido alojamiento. También algunos vecinos, que se acercaron hasta la zona del suceso, le ofrecieron su ayuda en lo que pudieran necesitar.

José Francisco indica que pudieron recoger algunos útiles personales como ropa y algunos objetos de valor antes de que se precintara la zona.

Hasta el lugar del suceso se desplazaron agentes de la Policía Local, Guardia Civil, efectivos del parque de Bomberos de Alhama-Totana, técnicos municipales de Urbanismo y operarios de Iberdrola y de la empresa municipal de Servicios Comunitarios, quienes procedieron a reponer el tendido eléctrico que se había visto afectado.

También, según explicó José Francisco Espinosa, responsables de la empresa constructora que realizaba las obras en el solar de al lado, se acercaron para interesarse por la situación de la vivienda afectada.