Cerca de 900 vecinos se han visto afectados en estos últimos meses por el cambio de las nueve calles con referencias franquistas que existen en el callejero, cuyo proceso arrancó el pasado mes de abril, y que aprobó el Pleno de Totana en septiembre.
El Gobierno municipal de Totana ha procedido al cambio en dos fases diferentes: primero se cambiaron cinco de las nueve calles con estas referencias, mientras que las cuatro restantes se modificaron en mayo.
El Ayuntamiento ha sustituido así todas las calles y espacios del casco urbano de esta localidad de forma progresiva que hacen referencia a la dictadura franquista por otros nombres con proyección más localista que hayan destacado por otros valores personales o profesionales, lo que conlleva una serie de trámites a los afectados y un proceso de adaptación.
Las concejalías de Participación Ciudadana y Servicios han trabajado en los últimos meses en la ejecución de esta orden que permitiera dar respuesta al acuerdo plenario, eliminando de forma definitiva los nombres relacionados con la dictadura franquista tanto en calles como en plazas, siendo sustituidos por nombres de personas que han destacado por su compromiso con Totana en distintas ramas de la ciencia o valores humanos.
Así pues, este proceso ha ido acompañado de una campaña de información a los vecinos, incluida una carta que ha remitido el alcalde de Totana, Juan José Cánovas, a los vecinos residentes en las zonas implicadas.
Además, se ha orientado a los vecinos ayudándoles a realizar sus gestiones de forma paulatina con administraciones y entidades durante un proceso de transición lógico. La pretensión era colaborar a nivel informativo con los vecinos afectados en su tramitación con las entidades implicadas, como pueden ser Correos, entidades bancarias, etcétera.
La primera tacada afectó a las calles General Muñoz Grandes (se sustituye por Antonio Martínez Garrido), General Asensio (Alfonso Sánchez Mateo), General Mola (Narcisa Navarro Morales), General Moscardó (Emilio Cobos Sánchez) y General Sanjurjo (Romualdo López Cánovas).
La siguiente fase permitió el cambio de denominación de las calles Calvo Sotelo (Alberto Gray Peinado), Onésimo Redondo (Soledad Perellón Almagro), General Varela (Ambrosio López Carrasco) y Federico Servet (Matilde Casinello Clares).
El Pleno acordó esta iniciativa el pasado mes de septiembre, con los votos a favor de Ganar Totana-IU y PSOE, en contra del PP y la abstención de C´s, con la que se pretende cumplir con la normativa vigente en relación con la Ley de Memoria Histórica.
En el 2007 se publicó en el BOE la Ley de Memoria Histórica que venía a reparar las injusticias y persecuciones sometidas contra las personas que lucharon por la libertad y contra la dictadura en España y sufrieron persecución o muerte por defender la legalidad republicana, derrotada por las armas en una Guerra Civil que nunca debió suceder, como recogía la moción.
La norma estatal aprobada en 2007 establece, entre otras cuestiones, que las administraciones públicas adoptarán las medidas oportunas para la retirada de escudos, insignias, placas y otros objetos o menciones conmemorativas de exaltación, personal o colectiva, de la sublevación militar, de la Guerra Civil y de la represión de la Dictadura.
La excepción son las menciones de estricto recuerdo privado, sin exaltación de los enfrentados, y cuando concurran razones artísticas, arquitectónicas o artístico-religiosas protegidas por la ley. Para ello, las administraciones deberán elaborar uncatálogo de vestigios relativos a la Guerra Civil y a la Dictadura.
El regidor de Totana, Juan José Cánovas, ha mostrado su satisfacción por hacer realidad una medida que viene a dar cumplimiento a la normativa estatal vigente; y ha subrayado que el proceso ha ido acompañado de la colaboración institucional para no causar incomodidades a los residentes y evitar el máximo de molestias a la hora de realizar las pertinentes gestiones para hacer efectivo los consiguientes cambios.